Siento haber tardado tanto en añadir una entrada, pero hemos tenido algunos problemas técnicos que nos han impedido el contacto con el mundo exterior.
Hoy voy a contar algo de los transportes públicos.
En primer lugar hay que decir que Riyadh es una ciudad enorme, con 1.551 Km2 de superficie y 5.100.000 de habitantes (datos obtenidos de Wikipedia).
Bien, pues hay que decir que no hay metro, ni tren de cercanías, ni tranvía ni nada que se le parezca.
El transporte público queda muy reducido. La población se desplaza en coches particulares con los consiguientes atascos que se originan.
Sin embargo, la imaginación hace milagros y podemos encontrar varios tipos de transporte público:
1.- El taxi: para gente con cierto nvel económico y muy usado por las mujeres, dado que ellas tienen prohibido conducir.
2.- El autobús urbano: y es que a cualquier cosa le llaman autobús. Destinado a las clases inferiores, siempre llenos hasta arriba de pakistaníes, filipinos, etc..., siempre con tubo de escaoe libre y conduciendo como locos.
3.- Autobús del trabajo: todos los autobuses de los colegios americanos están en Riyadh. Es impresionante, deben tener más kilómetros que el baúl de la Piquer. Ni siquiera los pintan y siguen manteniendo hasta el nombre de la escuela americana de la que provienen.
Y siempre quedan recursos y la inventiva no tiene límites:
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